domingo, 9 de marzo de 2014

Pararte a respirar.

Te paras a pensar, y piensas si verdaderamente merecerá la pena. Si de verdad debes hacer caso a tu corazón, o pararte a pensar otra vez.
No sabes muy bien por que ocurre todo esto, no te haces la menor idea, de por qué ese sin fin de sentimientos, y que ninguno trae calma.
Pararte a pensar supone, que las cosas no están claras y que es posible que dudes.
Dudar es el principio del fin, bien presente lo tengo, ¿Pero y que? Si es necesario pararte a pensar pues se hace, si es necesario parar el tren de tu vida y bajarte por que te estas mareando pues se hace y punto.
Y quizás ni tu quieras sentir o pensar eso, pero lo haces. Y sientes miedo, y para nada gusta, pero por mas que tratas de evitarlo, las palabras se clavan una tras otra, y así todas ellas, te aferras a todo lo que puedes, y con todas tus fuerzas pero sabes que eso algún día puede ceder y troncharse, es posible.
Odio esa discusión entre "vive el presente" y el "piensa en futuro" si haces una cosa no puedes hacer la otra, ¿Y cual es mejor? No lo sabes, no puedes decidirlo, y todo aquello te consume, y tw dejas llevar, sin importarte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario