Que bonito es el amor, cuando empieza, cuando florece por las mañanas, cuando tienes cosquillas en el estómago.
Que bonito es el amor, aunque ya no me acuerde. Que bonito.
Ver pasear a las parejas sin hablar, con un gesto de complicidad, con ganas de llegar a casa para comerse a besos.
Que bonito, no pensar en nadie mas.
Que bonito tenerlo todo.
Y no buscar nada más.
Que bonito es el amor al principio, cuando dura, cuando existe, cuando no lo inventamos. Aunque no me acuerdo. Que bonitas las caricias de buenos días, que bonito el sexo con amor. Si, que bonito no buscarlo y encontrarlo. Aunque quizá mañana por casualidad, que hoy me quedo un ratito mas en la cama soñándote.
Somos a veces el vuelo de un pájaro, otras su caída. Que a ti te da lo mismo y a mi ya no me importa.
sábado, 23 de septiembre de 2017
Que bonito.
domingo, 3 de septiembre de 2017
Espuma.
Cada 3 minutos sale un avión con destino tu piel. Creeme habría incluso corrido por dormir en tus párpados, no es que no quiera verte pero me dan pánico tus pupilas y su poder.
Pero hoy el mar esta demasiado revuelto y las gaviotas ya no toman tierra, será que tu tornado se ha calmado o que estas en un sueño profundo. Y así como si no estuviera, voy de puntillas recorriendo tu vida, intentando hacer malabares con botellas que me he bebido estas semanas intentando olvidar tu mechón en medio de la frente.
Intentando olvidar el revuelo de mi falda bailandote el agua.
Te acuerdas de mi, estoy segura de ello.
Sabes, hoy no han dejado de chocar las olas contra esas piedras, me han recordado a mi y a mis tropezones con tus decisiones.
He recordado como corrí mar adentro para salvarte y termine ahogándome en una simple ilusión.
Pero para ilusiones, las de aquel abril y sus mil lluvias a las 3 de la mañana intentando conciliar el sueño pensando en tus mejillas sonrojadas por el calor que hacia en aquella habitación después de las diez mil caricias debajo de las sabanas.
Ellas al igual que el mar nos guardarán el secreto.
El secreto de todo lo que podríamos haber sido, pero nos convertimos en espuma.