Me suele doler el corazón los domingos por la tarde.
Pero me duele un jueves.
Me parte.
Hoy no he podido salir de la cama de lo que me pesa el pecho, respiro, nada cambia..
He pasado por ti, en sueños y me has dejado plantada, tirada, destrozada.
Y me duele el corazón.
Y no me suele doler un martes.
Pero me duelen hasta las mañanas soleadas.
Estar partida en dos hace que tengas más superficie de contacto para que todos los puñales acaben en ti.
Somos a veces el vuelo de un pájaro, otras su caída. Que a ti te da lo mismo y a mi ya no me importa.
jueves, 31 de mayo de 2018
miércoles, 23 de mayo de 2018
martes, 22 de mayo de 2018
miércoles, 16 de mayo de 2018
Aquella vez.
A veces el pasado vuelve y te abre puertas que tenías cerradas o heridas.
A veces el pasado vuelve y te araña.
Te has mentido tanto tiempo, bajo la montaña.
Ojalá algún día.
Vuelve y te desarma.
Cuando creías que lo tenias todo hecho.
Vuelve y te aniquila.
Feroz, tanto como entonces, arrolla antes de verano.
Te hace volver. Querer.
Y clava más hondo el puñal.
Nulo.
A veces el pasado vuelve, aunque lo entierres, a veces vuelve volando y te congela.
Son solo palabras o eso quieres creer, pero, que importa ya.
Si ya paso.
Por desgracia, el pasado no deja huella únicamente en aquel momento, sino en ese posible futuro.
En ese posible, otra vez.
Y rota en el suelo, solo veo sangre.
Deja que sangre...
domingo, 13 de mayo de 2018
Ven, que las flores han empezado a florecer y los caminos se hacen agua.
Ven, que a la primavera le quedan los días contados, truncados, pasados.
Te estoy esperando en el borde de la cama por si vienes y te escapas.
Ven, que estoy pintando la habitación de sandeces y me gustaría tenerte.
Ven, antes de que el sol se apague, antes de que el sol se marche.
Cuentame los lunares, ven y cuentame que la vida solo es vida si unimos las fuerzas.
Con pasión, comprensión.
Ven y dile al amor, que ya te quedas tu.
sábado, 12 de mayo de 2018
No importa.
No me imagino otra cosa.
Y vuelta a empezar.
Estoy cansada de cansar, pero no para de fluir, me llega al pecho. Y vuelvo a empezar.
Prometo no caer, prometo no creer.
Estoy cansada de estar aquí, me duelen las costillas, me duelen las mañanas.
Mira que me lo avisé, mira que no puedes abrirte en canal y tirar por todo tu alrededor el cariño y el amor que tienes, precipicio, eso hay entre el mundo y tú..
Y aun así sigues empeñada en que era la mejor idea, romperte por todos.
Y sigues creyendo que alguien te recogerá y sigues creyendo que alguien lo entenderá.
Malditos años, maldito astio.
Maldito el día en el que decidí ser de papel.
Escribí en la quinta nube mis sueños y la tormenta no dudo en deshacerlos.
Hoy no ha salido el sol, hoy nadie te ha dicho que te quiere.