Estaba harta de escuchar tu nombre, tu nombre y tu historia.
Estaba harta de escuchar mi nombre, mi nombre y mi historia.
Esta harta de escuchar su nombre, su nombre y su historia.
Tristeza, desolación, comparación y perdida. Estaba harta de todo aquello, estaba cansada de tus idas y venidas, y de sus falsas escusas, estaba harta de mis mentiras, de mis pasadas.
Sinceramente estaba harta del triangulo, del enfrentamiento, aunque solo formase parte yo, por que tu, no querías que la otra persona se diese cuenta.
Y entonces eso hizo que mi mente volase, que tu te quedaras y que su corazón volcara.
Siendo sincera, era una historia que no tenia fin, que íbamos cuesta abajo y sin frenos, que íbamos a puñados, y nos quedamos a trozos, tu por tu parte, yo por la mia, y ella por la suya.
Algo nos unía, ese algo no era bueno, pero siempre permaneció, eso era el amor, el amor que tu sentías por mi y que yo sentía por ti que ella sentía por ti, y a la vez tenia que sentirlo por mi, y yo tenia que sentirlo por ella por que también lo sentía por ti.
Rareza, extraños, diferentes, locos, odio odio también nos unía, ese odio que yo sentía por ti y por ella, ese odio que tu sentías por mi y  por ella, ese odio que ella sentía por mi y por ti.
Mas, menos, que importaba, que importaba yo en todo aquello, y mejor cuanto duraría en aquella situación.
Estaba harta de ti, de ti y de ella. Al igual que ella y tu estabais hartos de mi.
Volvía el enfrentamiento, no se cuanto duraría, por que sabia que eso no iba a acabar, no tenia un punto y aparte. No.
Aquello era todo seguido, si querías montar era para no bajar en ninguna parada, iba directo, directo a una hostia segura.
Estaba harta, harta de mi. Harta de sentirme así.