Sin sueños, sin amor, sin ganas.
Cuando de todo falta, de nada se vive.
Sin cariño, sin ilusion, sin corazon.
Y es que desde entonces he aprendido que cuando salimos de casa hay que dejar el corazon por si te lo roban por el camino.
El mar sin agua, un circo sin payaso, un reloj sin aguja, un Paris sin luz, un libro sin leer, una cancion sin cantante, una guitarra sin cuerdas.
Todos somos imprescindibles para algo, para alguien. Pero a veces nos equivocamos, creemos que somos pero no, creemos que estaran pero no.
Seras la clave, lo ideal, pero cuando encuentras un encaje a la perfeccion, sera de mala calidad, viejo y usado.
Sin amor, sin gracia, sin querer.
Ay.
Amor, amor, amor. Dulce amor, tu eres el imprescindible en mi. Tu que trasformas, vuelas, gritas. Pero que dueles, rompes, destrozas.
Depender de algo tan puro, tan fuerte, tan vida. Vida, vida, vida a ti estoy enganchada, que desastre.
Si algún dia logro salir de todo esto, recuerdame solo con un nombre. Felicidad pero sin brillo, felicidad escondida.
Somos a veces el vuelo de un pájaro, otras su caída. Que a ti te da lo mismo y a mi ya no me importa.
sábado, 13 de septiembre de 2014
Imprescindible.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario