jueves, 7 de diciembre de 2017

Resquebrajado.

"¿Me vas a decir que me quieres? Ya tengo esa herida.
Tengo esa herida.
Y suena a resquebrajado. Una vez mas.
Ven, niña, te voy a contar un secreto.
Te voy a contar como sobrevivir a tu propia historia.
Estoy cansada.
Y cada vez que intento sonreír, clavan mas hondo el puñal. Y cada vez que le veo los labios, me preguntó por qué, en qué momento.
Y cada mañana. Cada puta mañana.
Todo esta patas arriba.
Me apoyo contra la pared y dejo que mi cuerpo resbale hasta que pies y muslos sean mi único apoyo en el suelo.
Acumulo llanto desde hace semanas. Pero no. Ya no.
Solo quiero destrozar el tablero.
Sin preguntar. Sin prepararme. Cae. Caigo.
Y me ahogo a mi misma. Me dejo ahogar. De golpe pierdo el apetito, toda la fuerza ganada, todas las batallas vencidas, las ganas. Y despacio, la vida se desliza entre mis dedos. Y yo me quedó ahí, pasmada. Esperando que el mar haga de mi como de la rocas, que poco a poco me desgaste. Que ojala encuentre algo aquí debajo. Tras todas estas capas. Tras todos estos años.
Y si no, que me lleve lejos.
A parte. "

No hay comentarios:

Publicar un comentario