Somos a veces el vuelo de un pájaro, otras su caída. Que a ti te da lo mismo y a mi ya no me importa.
El único idioma que hablaba no tenía palabras. No tenía sonido.
Quedé muda. Perdí vida.
Y ahora vivo en un océano sin saber muy bien. Sin ser muy bien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario