Si hubiesemos aprendido a querernos un 12 de Mayo, un 16 de Agosto, un 24 de Octubre...si hubiesemos aprendido.
Si nos hubiesemos echado a volar y acariciado las palmas de las manos.
Si alguna vez no hubiesemos sido fuego, cal, llanto y pena.
Podríamos haber.
Podriamos ser.
Pero no pudimos.
Las cosas pasan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario