Tendida.

Estoy allí tendida, es invierno, pero un sol abrasador me atrapa. 

Siento los cristales clavarse y no me puedo levantar, huele a sal. 

Huele a notas escritas, con una letra difusa, a libro nuevo, a sueños ardiendo. 

No hay nadie cerca, ni nada, estamos solos. 

El suelo quema cada vez más y los cristales se siguen clavando. 

No se como hemos llegado hasta aquí. 

Suenan sirenas, pasan barcos y no nos montamos. 

Seguimos allí, solo nos hemos encontramos en esa playa hecha habitación de la que no se puede salir y a la que nunca terminamos de entrar. 

A veces pasas aviones y no los llamamos. 

A veces te grito y ni si quiera me escuchas.

Estoy sonando triste, pero estas tendido a mi lado y no te puedo ver. 

Estoy sonando perdida, no sé donde estoy, pero no me quiero ir. 

Estoy sonando a final, pero no me voy a engañar. 

Este año ha sido duro. Hemos perdido muchas cosas.

Pero hemos aprendido, hemos apreciado una cerveza con amigos, un reencuentro, hemos entendido que las miradas sonríen más de lo que pensabamos. 

Hemos querido a distancia. 

He aprendido tanto, he vivido hasta la última gota. 

Y es que somos mucho más de lo que pensamos y podemos soportar tanto. 

La vida son todas esas cosas que no dejamos que pasen sin amarlas. 

Ha sido duro, pero hemos podido y vamos a poder. Ahora hay estrellas que brillaran siempre. 

Pronto volveremos a ser mucho más de lo que ya éramos. 

Gracias 2020 por hacernos amar tan puro. 

Es bonito ver todo lo que somos. Todo lo que hemos sido.

Nunca nos vamos a agotar. Estoy segura. 

Tú y yo.

En casa. 

Siendo todo lo que somos. 

Queriéndonos de esa manera tan bonita. 

A día de hoy esto me parece un sueño del que no me quiero despertar, así que sigue besándome. 

Nos espera el mundo. 

Esquinita

No se como se pide que regrese. 

No se como se busca entre los cajones. 

No se como se explican algunas cosas. 

Nadie lo entendería, a día de hoy ni si quiera yo he logrado hacerlo. 

Somos mucho más complejos que el paso de los días, que todo lo cura. O eso dicen. 

No se si de este tipo de laberintos se logra salir algún día, no se si con el enredo que tengo en la garganta se vive o tan solo se intenta. 

Hoy hace más frío en esta habitación, a veces la visito, es donde puedo hablar tranquila conmigo. 

Te espero un ratito. 

Siendo todo menos lo que soñamos. 

 

Un impacto brutal como si nada
Cada vez que me lo pides lento
Cada ves que me susurras para
No sé dónde mirar cuando vas de cara
Un intento fatal es una cagada
Cada vez que me lo pides vuelco
Cada vez que escupes lava
Cuánto tiempo va a llevarnos
Reponernos de los golpes
Y seguir disimulando que aún no me conoces
Y afuera en la ciudad
Sigue lloviendo
No vuelvas a llamar
Como a un incendio
Vamos a salir perdiendo

 Sé que no me entiendes y te lo agradezco, ojalá te vuelvas libre, ojalá me vuelva pájaro. 

 'Como si no hubiera pasado el tiempo y fuera ayer'

¿Quién te cantará?

Mi cielito lindo, cuida que no pase na'

Con la vida recién empezada, nos toca escapar para buscar la única que nos hace sentir todo eso que ninguna otra cosa nos hará sentir nunca.

No son decisiones propias, uno no controla el mecanismo interior. 

Peonza.

Tengo canciones clavadas, ojeras crónicas y algo de miedo entre los huesos. 

Me gusta sentir las cosas como si de un rayo se tratara. Me gusta poder fundirme en el agua y rozar tu piel sin que te enteres. 

Soy de acero, fundido y ardiendo. Soy todo lo que me pedías a gritos desde aquella estación de tren. Tirados en medio de las vías jugando a ser desconocidos, dos muchachos perdidos. Saltando montañas nos hemos encontrado, en ese mundo que sólo ven los que sueñan y los que anhelan. 

Me gusta poder ser cosas sin decirlo, me gusta poder escribir cosas que siento, aunque sea lejos, en morse y muy pobre. 

Me gusta. 

A veces sueño contigo y me da miedo por si tu también. Por si nuestras mentes huyen para encontrarse allí.

A veces solo soy humana, con todo lo que eso conlleva, siendo irracional, siendo puro instinto. 

Historia.

Tengo una historia que contar guardada entre mis libros. No sé si algún día me atreveré. 

Me hace feliz haber dirigido mi camino, aunque sean unos pasos, haber puesto los primeros escalones del futuro. 

Me gustaría contarte muchas cosas, como no dejo de volar, como ya nada va mal. 

Pero siempre existirá la duda de cómo sería si no hubiésemos sido esa historia, esa sola. 

"Voy a dejar que resbalen mis pies, caer en picado
Voy a mirar tu ventana, en pleno descenso
Y voy a sentirme indefenso
En pleno derrumbe creerme que pienso que no se podía evitar
Cargo un dolor tan intenso que cada comienzo me deja regusto al final". 

Piedras.

Hay días en los que sentimos más frío, en los que estamos más perdidos, en los que tenemos atravesados en la garganta lo que somos o lo que hacemos y no somos capaces de soltar la piedra.

Sinceramente resumiría esa etapa, como eso no ser capaces de soltar la piedra. 

Y te acompaña y te duele. Pero la sueltas y duele más. 

A veces los días de Noviembre son así. Crees que habías soltado la piedra pero abres el cajón y allí sigue. 

Porque la vida no es viento que se lleva las hojas, la vida es ese cajón y esas piedras. 

"No sé cómo será cuando no disparas
Un impacto brutal como si nada
Cada vez que me lo pides lento
Cada ves que me susurras para

No sé dónde mirar cuando vas de cara
Un intento fatal es una cagada
Cada vez que me lo pides vuelco

Cada vez que escupes lava

Cuánto tiempo va a llevarnos
Reponernos de los golpes
Y seguir disimulando que aún no me conoces

Y afuera en la ciudad
Sigue lloviendo 
No vuelvas a llamar
Como a un incendio
Vamos a salir perdiendo"

Sembrando sueños donde había huecos. 

Ojalá me hubiese podido montar en esa botella de cristal dirección al rincón más recóndito del planeta.

Allí donde soñaba con escapar de mi, de ti, de nosotros y del resto de espectadores. 

Ojalá hubiese tenido valentía. De dejarlo todo atrás. 

Tengo muchos sueños guardados en aquel rincón. 

Parecen siglos.

"Estoy poniendo seguros a las puertas de nuestra casa. No puede entrar nada de nada. Solo la luz del sol de Noviembre. Por las ventanas.

Estoy contigo.

Sé que suena absurdo. "

Corazón

"A veces dudas de mis buenas intenciones
Y haces bien para evitar los empujones
De los abismos de la acera que me nutre
De tanta sanguijuela que chupa mis canciones

No es que este lejos, es que estoy en una nube
Que con levante o con poniente que se anude
Baja a beber en los estanques que me subes
Y va ensamblando flores en tus latitudes

Tengo la piel como navaja de reyerta
Tengo la espalda pa llevarte siempre a cuestas
Y ahora administro mi desayuno de setas
Y ya tengo el agüita para hacer la fiesta

Y yo
Enciendo una hoguera
Quemo mis ojeras
Me planto en una maceta
A ver si me riega
Tu llanto de arena
Y viene
La primavera

¿Y tú qué dices, corazón?
Que no se me acomode el amor pa cuando estalle
¿Y tú qué dices, corazón?
Que me tiendas al sol en plena calle
¿Y tú qué dices, corazón?
Que el tiempo es la fragua que aprieta mis alambres
¿Y tú qué dices, corazón?
Que te calles, que te calles, que te calles

A veces tengo la cabeza como inerte
A veces tengo la certeza de tenerte
Y me endulzaron las heridas con los peces
Y tengo una pecera sólo pa beberte

Y alquilo vuelos sobre abismos apaisados
Y me desvelo cuando huelo el rasurado
Que es el otoño en esa luz de tu geranio
Te cambio los miedos por unos bocados"

"con tu mierda de poema sin su olor sin su piel..." 

Te escucho en tantas canciones, 

te vivo en tantos sueños, 

te escribo en tantos textos...

te siento tantos días.

 

Siempre he soñado con escapar muy lejos, allí donde todo sea posible..

"Me da que no lo podemos asumir, que solo es un poco, que no pasa nada...que duele en el centro y nunca falla". 

A veces no se como decirlo. A veces no se si recordarlo.

Pero sigo estando donde siempre, al girar la esquina. 

Porque el cielo no vas dejar de ser azul y yo no me puedo arrancar el pecho. 

Aún buscando liberarte.

Si necesitas un cable, una mano, un hombro o unas palabras aquí estoy.

Desde el momento en el que las hojas de otoño empiezan a caer hasta que el verano se empieza a esconder por lo alto de aquellas montañas. 

No dudes en gritar desde lo más alto, no dudes en seguir viviendo en un do menor que solo tu entiendes. Pero que no dejo de compartir. 

Siéntete libre de ser todo lo que quieres, pero nunca dejes de cambiar la vida como solo te he visto hacer a ti. 

Da igual cuantas vueltas dé este estúpido planeta, no te bajes de él. Sigue bailando cada noche en los tejados. 

Se que lo intentas evitar, pero no se puede escapar eres tan yo que me tiras a matar.

Fuego final,
lo digo y no lo puedo escuchar,
los días se escapan,
las nubes se van.

Si alguna vez fui un rayo
y no te supe esperar,
maldigo mi suerte,
me quiero matar.

Las victorias nunca pasan por mi lado,
las promesas y las dudas en el mismo trago.
Te necesito cerca, aunque sea un rato.

Verano.

Cerrar etapas se siente muy dentro.

Dejar atrás los días largos, la vida mojada, los sueños prendidos... 

Es precioso volver a terminar estos meses con ganas de más, siempre con ganas. 

Estoy demasiado orgullosa de estar donde estoy. 

Os llevo dentro. 

Dibujados en charcos.

Me gustaría pasear por nuestra vida como una extraña. Pasar por esos cafés. Respirar el olor a canela. Desde tan lejos que no me vieses el miedo que me da decirlo. 

Me gusta que la vida nos persiga, nos siga escribiendo notas. Nos permita mirarnos a través de los retrovisores de los coches.

A veces me escondo tras una distancia inmensa de nudos que no dejan escapar de aquel lugar. Pero es bonito vernos de lejos aunque ni si quiera nosotros nos miremos.

De reojo y casi sin querer.

El tiempo elige cuando darte en el centro y certero. 

Sabiendo que no y no dejando de sentir que si. 

Godzilla.

"Sigue perdida en mi laberinto mental desde el pecho a la garganta trepa cada mañana, luego por el tobogán se desliza hasta la tráquea, agarrada a mis costillas me cuelgan las piernas....

Se ha dejado algunos huesos todavía sin pisar y un montón de luces encendidas... "

Mirarte.

Me da alas. Me hace libre.

Me haces rematadamente feliz. 

Tú y las 27 mil razones que me has dado para amarte. 

Florecitas.

Hay flores que crecen, cambian y pierden sus pinchos, algo tarde quizá para la persona que las cuidaba y las regaba, pero nunca es tarde para la flor.

Sabes el mimo, el agua y las ganas que le pones y que como flor rebelde se empeña en no florecer. A veces somos así, hojas movidas por el viento que no son capaz de echar raíces. 

Hasta que te empiezas a ir del camino, sabes que si no te vas, no va a funcionar, sabes que todo lo que estás haciendo por esa florecita los intento porque florezca cada mañana de primavera no comienzan nunca. Hasta que la flor deja de verte y se alza en tu búsqueda hasta donde siempre habías querido, aunque ya estés lejos y no puedas verla, lograste que floreciera. 

A veces hacemos cosas por las personas sin darnos cuenta, a veces muy a consciencia. A veces nos tenemos que sentir orgullosos en la distancia y aún así es bonito. 

Porque llenar el mundo de florecitas preciosas aunque no seas tú el que disfruta de sus colores, es el acto de amor más bello que existe. 

Nosotros

Probablemente seamos una de esas historias que aún no hayan empezado a escribirse.

Podríamos hacer como si no existiese como si todo lo que escribimos fuera mentira. 

Podríamos cerrar los ojos y hundirnos bajo la marea, podríamos. Pero no podemos. 

El verso nos arranca las palabras que están escondidas bajo un manto de arena fría. A veces nos estrellamos contra los yo nunca.

O quizá alguien ya esté escribiendo nuestra historia. Quizá nosotros mismos. 

No te acabes nunca. 

Mar.

El mar es esa extremidad que me falta a lo largo del año. Donde me baño de una de esas historias, donde me hablo y me pregunto todo lo que no soy capaz de preguntarme en tierra firme. Me gusta ser todo lo que soy aquí, en medio de la nada me vuelvo a encontrar.

Al mar le he contado tantas cosas, me entiende tan bien me mece tan suave. 

Hoy he mandado un mensaje en una botellita de cristal, para que lo bañen las olas y no quede náufrago. 

Rumbo.

Conviertes en hogar lo que tocas. 

Quizá.

No tiene sentido intentar entenderlo ahora, desde lejos, con otra vida, con otros recuerdos ahora desdibujados y pintados de una manera más ventajosa.

Son cien soldados armados de valor y miedo, por lo que somos y lo que fuimos. Por lo que se podría ser si tuviésemos otra vida. 

Quizá es mucho más fácil de lo que cuentan, quizás necesitamos beber de ese pozo para descansar por fin, para tener calma con lo que sentimos que pensamos. 

Los sueños son así, las ganas que no vamos a gastar, las vidas que no vamos a tener.

Quizá somos así. O quizá no. 

Vivir.

Donde te quieran bien y con el viento en calma.

Donde sepas que aguanta, donde las bestias se amansen y las plantas no pierdan sus hojas. Donde las puntas no existan, los cuchillos pierdan su filo y las cuestas no tengan pendiente. 

Donde el invierno no trepe por tu espalda y las noches no sean malvadas. 

Donde el cielo no se canse de reír, donde las nubes no se cansen de volar alto...ahi es donde quiero vivir. 

Tormenta

Tormentas que llenan la vida de pena.

Tengo un nudo en la cabeza y me arde. 

De color escarlata estoy pintando una pared de mi cárcel. Le dejo volar a ver si vuelve con noticias desde el mar. No resuenan cañonazos, nos disparan con las manos. 

Estoy sintiendo mi puñal en el pecho, me estoy saliendo de mi propio argumento. 

La noche nos pierde, nos araña y nos miente. Somos parte de una obra que nunca termina y pajarillo no vuelve, lo dejo volar, pero no vuelve. 

A veces no soy capaz de ser esta, ni la otra.

El pajarillo está cantando en mi ventana, ya no sabe quien soy. 

El sol está saliendo por el horizonte, ya no sabe quien soy. 

Tengo sueños estancados en la garganta y ya no sé cuales son. 

Hemos inventado mundos nuevos en los que he cambiado lo que no me gustaba ver.

He escondido las ganas que no quería tener y así la vida corre mejor. 

Desde entonces el mundo es más tranquilo. Desde entonces las nubes son menos grises. 

Pero es un mundo de mentira. 

Sigues visitando los mismos jardines, a temporadas. 

Sigues llevando la misma piel. Sigues estando al margen de la vida que viven el resto de mortales. 

Sin flores ni en verano, sigo pensando en un día que jamás va a llegar. 

Mundo

Peleo conmigo.

Quiero ser mi mejor versión. 

Me pides que deje correr los duendecitos por mi salón.

Me alejo y me duelo, yo solo quiero ser la mejor versión. 

Todo por ti, todo por el amor. 

Somos níquel fundido sobre un frio amanecer.

Soy rosas rojas esperando en la puerta. 

Un jardín como el que soñábamos, estamos siendo dueños del mundo. 

Ya has comprendido, cosa que estoy aun en proceso de ver.

Yo no sé si aún lo he visto claro del todo, o sigo arrancando flores. 

La verdad es que no se cuantas veces se tiene que partir en cachos para entender que las cosas no las controlamos, que por dentro somos otro al que no dejamos salir, por miedo, por rencor, por tristeza. 

Me he visto acorralada muchas veces por mi misma, por mi otro camino, luchando con dos voces que casi gritan lo mismo. 

Ya me entiendes, solo tú puedes ahondar tan dentro, tú que estás tan dentro de mí que a veces te confundo conmigo. 

Esa soy, dos calles más abajo de donde ahora estoy viviendo, tratando de buscar recuerdos.

Esa es la luna menguante asomando...y dando alas allá donde se necesiten. 

Porque en la vida tenemos muchos hombros, algunos no los vemos, pero entre el viento, entre los cantos que recorren las paredes, entre los muros que separan ahí aún nos podemos encontrar. 

Yo y la suave brisa. 

Desde que me cuidas.

El verano en calma, tengo los huesos rotos de correr y me besas.

Me besas tanto que puedo volar. 

Tengo la cara llena de agua de tristeza y palabras retumbando en mi cabeza, pero tú me besas. 

Me besas cada vez que hago algo bien, cada vez que lo consigo. 

Me besas sobretodo cada vez que fallo. 

Me besas, da igual cuando, pero no me dejas de besar. 

No importa que no lo entiendas.
Ni que no me entienda.
No importas.
Ni importo.
Todo pierde sentido.

No va a a ocurrir.
Ni soy ni tienes.
Y todo funciona asi.
Cuando creíamos que ya esta hecho.
Cuando todo se apaga.

No va a ocurrir. 

… Te haces bicho bola
Cuando hay gente nueva y no controlas
Y no ves el momento de salir... 

Desde que vives pegado a mi espalda mi vida se ha convertido en una de esas que se escriben en grandes libros.

Desde que vives soñando conmigo las metas se han acercado.

Desde que existes como casi todo, como casi nada, el remolino ahora gira con una dirección fija, la calma y la felicidad. 

Si soy.

Cuanto más me escribo, más me pierdo.

Más dejo de entender que tienen los días encerrados en mi pecho. 

Más salto a un vacío sin cadenas ni soporte, sin poesía ni esa vida que anhelo con miedo. 

A veces la miró desde un cristalito, alejado, empapado de preguntas sin responder, de vidas estancadas, avanza, me dicen mis fantasmas. 

Uniendo la línea de puntos que une mi constelación favorita, siendo soldados de una guerra perdida, escribiendo para que todo esté enredo de sensaciones sepa encontrar un camino a un destino sin nombre. 

Vientos de futuro.

Como a pesar de los años no se borran los peldaños.

El viento trae las hojas. 

La vida retorna en roja. 

Y somos, un poco más esclavos de un recuerdo olvidado. 

Y somos, alguien que ya no sabemos quién es.

Y sigo mirando el mismo sol de siempre. 

Y sigo pisando el mismo suelo de siempre. 

Y sigo viviendo la misma historia de siempre, aunque arropada. 

Y sigo leyendo en verso, entrelineas y muy lunatica, tanto como siempre. 

Porque la vida no deja de ser, ni yo me dejo escapar. 

C.

Últimamente están pasando cosas muy bonitas y las quiero disfrutar a sorbitos. Sentir que estas siendo tremendamente feliz y poder vivirlo es una bocanada de aire fresco, es el olor del mar y días soleados.

He entrecruzado dedos con un fantasmas. De esos que conoces aunque no hablen.

He conocido lugares con olor a sal sin ni si quiera salir de mi. El mar en los costados golpeando vidas que no he vivido.

Sonrisas pegadas a otoños en un verano áspero. 

Y el sol, pegándonos las sábanas por las mañanas. Así es la vida. 

Desde que mi nombre no tiene latido. Hasta que mi vida no tiene sentido. Esos somos, un carrusel de ilusiones.

Ese océano tembloroso, sin manos donde agarrarse somos extraños desde que no nos tocamos. 

vida.

"Uno es de donde llora, pero siempre querrá ir donde ríe."

Quizá me hubiese perdido. 

He vuelto a escuchar esa canción, susurrada por el viento.

He vuelto a cruzar esa esquina. 

Como si no hubiese pasado el tiempo, no iba a dejar nada fuera. 

Quizás...podrian aprender de nuestros aciertos y sobretodo de los errores que cometimos por el camino. 

Cerrar etapas.

Cerrar etapas te deja con una sensación de pérdida, con el anhelo constante.

Humo desatado y algo intenso, casi muertos nos sentimos sin rumbo.

El reloj ha pasado tan rápido. Han pasado tantas cosas. Hemos enterrado historias, creado cuentos, nos hemos bañado en mares, paseado por arena virgen.

He guardado todo en una maleta y he empezado la mudanza de vida. 

Así vienen las ráfagas de viento, llevándome lejos. 

"Escribir pensando que nadie va a leerme, solo así me encuentro en mi, más se mueve todo cuanto más me estoy quieto". 

Un mar.

No sabía que estar tanto tiempo alejada de la piel con la que convives iba a desgarrar tiempo, perdiendo vida.

"La vida desde entonces un concierto sin entradas para mi..."

Ya sabemos.

Una carta sin enviar será siempre eso, un quiero y no puedo de esos que te dejan sin dormir días. 

He olvidado quien era cuando aprendí esa lección, lo tengo en el pecho. 

Pertenezco a eso que odio, desde que me fui.

71 días.

Hace tantos días que mis dedos no rozan tu piel, que estoy sintiendo como mueren mis ganas de nacer.

Fases, pasamos, no importa no acorta. 

Quiero tener tu aliento cerca, tu brisa, te estoy buscando lejos quiero tenerte cerca. 

71 días sin ti y el mundo se ve tan feo desde que no hacemos magia. 

Da igual.

De igual si llueve o llora. Da igual si es de día o si la luna hace que lleves tres de tus copas en sangre. Da igual si es verano, invierno o estás escondido debajo de aquel árbol.

Da igual si nos cruzamos, si nos evitamos, si estamos volando. 

Da igual la falda y la camisa, da igual la gente que mira, da igual el día que sea. 

Cuando las pupilas se cruzan se rompen los esquemas. Lo alto que habíamos gritado, la vida que habíamos construido. Con tan sólo una mirada. 

No quería escribir sobre mi. Pero soy ese pajarillo que ves volando en el cielo azul de un casi verano, en el que como siempre...vuelvo a florecer.

Empezar.

Ahora quiero ser otra persona y en otra vida. De esas de casualidad, de película mala, pero muchas distintas. Planos alternos y estrellas fugaces. Ahora quiero ser los otros sueños, la vida entera cada día sin parar de ser cosas nuevas.

Como en mi libro favorito. 

Que ganas de escaparme. 

Miedo.

A veces vuelves a tener el cielo reventado a cañonazos, a sangre fría.

Tengo toneladas de sin sentido acumulándose en el pecho. Sacos de pena reventandome los huesos.

Siendo sinceros, ya no, ni aún nuevo. 

Tengo el corazón apuntalado. Tengo la vida a media asta, sin ganas. 

Soy lo que era pero ahora sin camino. Lo que dudo pero ahora sin estribos. 

Llorando por dentro me recuerdo reflejada en aquel miedo. 

II

Volver a volver, saber que no estás y yo nunca estaré. No quiero contar lo mismo que ayer. Ahogar las palabras, quemarme la piel. Mis memorias me persiguen, de eso no puedo librarme. De lo que fui solo queda hueso y carne. Recuerdo lo que me dijo mi abuelo aquella mañana: "se puede perder la vista, pero nunca la mirada".

En paz.

Me parece precioso recordar días sin dolor ni guerra. Si no con cariño y ternura, aquellos días donde fuimos más que humanos, tenía una sonrisa nerviosa y el pecho caliente.

Hoy me tumbo un ratito en cada portal con recuerdos, en cada abrazo con frío, en cada bordillo con risas. Porque nos lo merecemos. Nos merecemos recordar de una manera serena y real las ganas de comernos el mundo, las ganas de demostrarlo. Porque podemos intentar volver a aquellos días, a aquellos saltos, porque tenemos demasiado vivido y nadie nos lo puede robar, ni el viento, ni nuevos recuerdos. 

Y eso es un regalo precioso, tener tantos rincones que visitar, aunque sea solo un domingo como hoy. Aunque el paseo no salga del día de hoy. 

Sombra.

Seguiré aquí, porque con el tiempo entendí que no me hace falta olvidar, odiar o reprochar.

Seguiré aquí porque no se puede escapar. Porque hay cosas necesarias, porque la brisa acompaña y ya no hay miradas.

Entre estas lineas como siempre, soy yo. 

Pluma.

Con el mar en calma se vive mejor, con los sueños encendidos y con la luna cuidándome.

Desde que estás ya no quiero ser otra cosa que no sea tu piel, desde que existes ya no quiero vivir otra vida que no sea la nuestra. 

Creo que es fácil de entender, eres mi punto cardinal en la tormenta. 

Llamas.

Mi vida fue escrita en una estación de tren con papel y boli y ganas de quemar al sol.

No soy quien para decirte que hay que hacer estando en pie. Soy casi más estrella que persona, fugaz, por supuesto. 

Siendo esclava de mi llanto me recuerdan aquellos cantos, casi ahogados, atragantados. 

Soy un poco menos que ayer y algo más que mañana, sin querer salir del hoyo, quedándome con la piel en llamas. 

Ni el tiempo.

Parece que el tiempo no ha pasado y que estamos ahí aún. Que lo podríamos hacer, que podríamos revivirlo, encontrarlo, cambiarlo, sentirlo. Parece que no haya pasado vida suficiente que nos haga no recordar cada sensación, cada olor. Parece que esta grabado a fuego y lo puedo seguir tocando en mi piel. 

Es increíble que aún pueda mirarte sin verte.

Que no ha pasado tiempo para saber decir yo ya. Porque creo que yo nunca y la montaña se derrumba sin yo poder hacer nada. 

Esa soy yo huyendo como siempre, de una espina clavada en un mundo que ya no es mio.

Hasta hace poco podría imaginar volver ahora solo me queda soñarlo. 

Nadie.

Golpea la lluvia en mi cristal, suena Pereza de fondo "4 y 26" las referencias son bastante exactas.

Como siempre que me invaden los miedos, sigo siendo la misma chica de ayer, aunque hablen de más. 

Creo que no he podido guardar los sentimientos más de dos canciones seguidas sin romperme en pedazos.

Creo que es bastante justo, creo que merezco que la lluvia no deje de caer y se empapen todos mis suspiros, que se ahoguen, que me ahogue. 

No se como sacármelo de dentro sin hacer daño, sin tirar demasiado... sin dejar nada enquistado, de nuevo. 

Tengo tantas canciones guardadas bajo llave y todas vuestras. 

"El día que no pueda más

voy a matarte
que me mate la pena...". 

Soy todo ese nudo de cosas que solo se ser aquí, donde no soy nadie. 

Casi extraños.

He bajado el caminito que no me atrevía a caminar ni a pelear.

Me he mirado al espejo del que no quería saber reflejandome años atrás con la misma cara que ahora.

He sentido el olor de tu piel a kilómetros casi sin saberlo. 

He tenido la vida cruzada, la seguiré teniendo. 

Antes me preguntaba a menudo si la gente se comportaba de esa manera o lo ocultaban en el más recóndito lugar de su existencia.

He dudado tantas veces si serviría de algo ver crecer todas esas flores si quien plantó la semilla ya no está. 

He deseado tanto levantar un muro de hormigón entre tantos perdones, cuando ni si quiera me he perdonado a mi misma aún. 

He querido caminar este camino sin aún haber llegado al destino. 

Tú eres mi Tierra.

27.

Justo cuando más te necesito estas tan lejos.

Justo cuando más me necesitas estoy tan lejos. 

Tú eres mi sol. 

Yo soy tu luna. 

Tan iguales sin querer. 

Viéndonos florecer. 

Tú tan hueso yo tan piel, joder que me desgarro. El salitre ya no esculpe mi figura ni el viento huracanado rompe con mi camino, que no va más que detrás de tus pasos ahora firmes, reconducidos. Nadie se acordará de aquel secreto guardado tras todos esos kilómetros de angustia y carcajadas ahora ahogadas en la playa que nunca pisamos.

¿No lo entiendes? Los gritos que rebotan en mi sien no son capaces de encontrarte, joder ¿donde te has ido?... 

Fuera de serie.

"Aún resuena el eco de tu voz desdibujada
yo haciéndome el sueco y tú en la montada. 
Cerrando la guardia, golpeando al muñeco
la cara morada y en el alma, un hueco. 

Y si nada importara, serías mi prólogo
¿cómo cuento al micrófono la sensación de ahogo?
Que retienen mis párpados, faros prolongados en la costa
apuesta que no lo hice aposta. 

Que siento un amor gigantesco por las hojas en blanco
en cuanto me estanco, debo acudir a ellas.
Porque ellas traen algo que siempre me faltó
que tú me das tanto, pero así no me llenas.

Dices, "No hay espacio para las dos"
yo te digo, "Aquí cabemos más de tres".
Viví en tu palacio llenos de trastos
sé que estoy dejando que me trastees.

Y a gusto los bastos pintaban realismo
a veces me ensimismo encerrado en mí mismo.
Aparece un abismo y parece que no seas la primera
nada que ver con que ya no te quiera.

Y si ibas a estar en mi malestar, ¿qué haces?
si vas a saltar del barco, al menos avisa.
Te tiro mi camisa al mar, y hacemos las paces
para improvisar una última sonrisa. "

Como todos.

Dolor en la sien casi no puedo salir de mi propia cabeza.

Estamos todos encerrados en este cuarto pataleando, estamos todos al borde del colapso. 

Buscando la manera de salir lanza un atisbo de esperanza, ya casi muerto en las puertas de casa. Esperando. 

Cuarto movimiento.

No sabes de que color tiene pintando el mañana el cielo. No sabes lo que puede ocurrir cuando salga el sol.

No nos atrevemos a pelear por ello, solo sabemos correr y escondernos en lo que aún no se si confundimos con calor y calma o si verdaderamente lo ha dejado de lado. 

El paso de los segundos se va llevando las hojas caídas, eso cuentan por ahí las malas lenguas. 

Nosotros no hablamos en voz alta, no hay segundos que nos hagan articular palabra. 

Escribimos, pintamos, cantamos pero no somos capaces de decirlo ni gritarlo. 

Hemos pintado de color olvido y así al menos es más fácil, aunque solo sea más fácil. 

Redes.

A ver quién quiere más, a ver quién olvida mejor. Competiciones sin cabezas con sentimientos guardados lejos y cerrojos suficientes para no ser abiertos en décadas.

Siendo conscientes, mordiendonos la lengua, comiendonos la cabeza, mirando a las estrellas sin vernos, sin vernos. 

Colgando en una tela de araña enredados en yo no, en no soy. Caminando lento para no confundir el camino, mi destino, mi estribillo. 

En no ser somos expertos en correr tras la red siendo extraños que se conocen demasiado, alto el paso que nos lo hemos ganado. 

Juntos.

"Partimos el pan inclusive, tu mano tendida hacia el fondo. 
El aljibe, ¿recuerdas? Roma, el Caribe. 
Mi alma te escribe, su ruina, mi reina. 
Apenas concibe caminar sin verla. 
Perla de oriente, ponte a mi mundo, siempre presuntos. 
Pero estoy lleno de amor porque lo hicimos juntos"

Cuarentena.

Millonarios de amor, de sueños, de ganas.

Si me salvaste de todo aquello, tú y yo salimos de todas juntos. 

La cuarentena sin ti va a ser una década. 

Somos fuertes, somos uno. 

¿Recuerdas?

"Yo te digo, tú me dices 'nunca pares' que te adoro a pesar de los pesares.

No quisimos nada más del asuntos más fue maravilloso navegarlo juntos." 

Lejos.

A veces toca coger aire y respirar fuerte. Sentir como que no es como nos llega a los huesos. Sentir que esta pasando pero no va a durar.

Tengo la suerte de poder soltar todo el peso en un canal, en una vida más allá de la mía. 

Mi cabeza esta llena de cosas en las que no quiere pensar.

Es increíble que en unos meses nos vayamos juntos a vivir a Nápoles. Es lo único que quiero tener en el pecho. 

Como si bastara.

Todo eso que quiero pero que no se cuando va a llegar. Todas esas ganas de conseguirlo de volver a vivirlo y "siento decirte que yo, quemó la noche como hizo enero".

Todo lo que vivo con el nudo entre los pulmones de no querer que acaben y otras que no llegan nunca. Otras que nos tocan cambiar, otras que nos tocan no ser, no vivir. 

Del viento...asi me vienen las luces, los sueños, las vueltas al sol en medio día acelerado muerto de pena. 

Somos tanto sin ni si quiera vernos.. 

sigue perdida en mi laberinto mental.

Puedo dedicarme a disimular
Puedo destruirme despacio
Puedo dejarte en paz
Puedo conquistar un planeta
Y hacerlo explotar.... 

Desplazada, sin sentido, sin ganas.

A veces los sentimientos no son de uno mismo. A veces ni si quiera soy de mi misma. 

Si la primavera me hiciera sangrar la boca.

Supongo que donde estamos es donde queremos estar, pero no se nos va de la cabeza. Aún sabiendo que tiene solo un huequito por dentro, que casi no pero si.

Navegando

.... 

-

Ábrete paso
Por el camino de estrellas
Tú solo mueve los brazos
Que yo te curo allá a fuera... 

Si algún día me pierdo
Búscame en Mazunte
Costa de Oaxaca
No me sufras maquita
Te llevo clavadita en alma... 

Te quiero sin verso porque eres mi única poesía. Así siempre con amor. 

Real.

Te encuentras a medio camino de no ser nadie por no dejarte ni a ti misma ser como eres, hacer lo que quieres y querer sin redes.

Te encuentras como desde hace tiempo en un vaivén de emociones, de barrancos, de salidas de emergencia que no conducen a la calma. 

Pero ya lo sabes, a un paso de escapar a veces nos toca aguantar la tormenta y dejar de esperar que pase. 

r.

Estamos tan en lo alto de la cima juntos...que casi ya no me acuerdo de cuándo tenía nudos diarios en el pecho.

Todo por ti, que dibujas cielos azules en techos negros, que me das la mano hasta en la distancia y aquí estamos mirando la vida desde las alturas, nuestra altura. Siendo tan nosotros, temblando tan bien juntos. Siendo tan felices que aún dudo mucho que haya algún ser en la tierra que pueda igualar este sentir, este vibrar, está luz.

Almas gemelas dicen... 

te quiero...

Creo que podría hablar años de lo feliz que me haces, de la vida que me das, de lo que me embobo escuchándote, de lo que te quiero.

Podría hacerlo cada día de mi vida, siendo un remolino de suerte, caricias y sonrisas. 

El sol a tu lado es el paraíso, aviones volando a destinos alternativos.

Me haces tanto bien querido mío. Soy un vendaval infinito de ganas, de besos de días que aún nos quedan por construir. 

Me has salvado de tanto... 

Todo mi mundo está en llamas.

Y trato de pagar con un verso lo que te debo. Me vuelvo loco para no volverme loco y me muero de hambre para no morder el cebo...

Cuanto más lo pensemos peor.

"Cambios de vida de ritmo y maneras recuerdos de días que ya no nos quedan, testigos de incendios llamando a tu puerta y que vas a hacer, correr lo más rápido que puedas...."

Unidos de nuevo se quedan mis huesos a esta casa fría que sigue siendo mi hogar a pesar de ser ahora más nómada de vida que otra cosa. 

Otra vez toca cargarse a las espaldas las ganas de volver a, otra vez cuando parece que se va a acabar. 

Tormentas de tortura se llevan los días grises, aún queda frío y gritos en un océano infinito. 

Aún falta para que la arena y la sal bañen tus poros, mis ganas de algo nuevo.

Me estoy ahogando en lo que me estoy convirtiendo, necesito respirar conmigo, buscar mi recompensa.

"Seguiremos dando palos de ciego al aire...".

La misma canción.

Esperando una luz de fuego que me ayude a entender.

Siendo sin ser casi a contraluz, todas las notas de tu guitarra de tu música. 

Le hemos dado el poder a otras almas de estar donde teníamos prohibido, de pisar por dónde pisabamos de ser lo que eramos, pero escondidos en lo que somos. 

Perdida y ahogada entre estas calles me encuentro como si no tuviesemos suficiente con el frío y el viento. 

Como si cada maldita esquina no nos recordase el dolor, la culpa, los miedos. 

Te darás cuenta con los días, con los meses que siempre regresa aunque no lo veamos que siempre suena la misma canción. 

Guardo sin tocar las ganas de volar.

Hoy volví a soñar. Sonaba alegremente... 

"Dime qué precio has pagado por tu libertad
Es la distancia una cárcel, es noche y olvido
Es aburrido pensar en que no hay que pensar
Qué triste acordarse del triste final
De los que cayeron durante el camino

Dime que te has acorda'o de guardar
Nuestras hazañas entre los cajones
Muchos cartones con los que montar
Fuertes y cabañas, tanques y murallas
Vuelve, que incendiaremos el mundo otra vez
Que incendiaremos el mundo otra vez"

Como siempre envueltos en nuestra burbuja queremos ser ajenos a todo. 

Queremos dejar el mundo como estaba. 

Pero es algo que hay que aprender a lidiar con ello porque nunca se va. 

Sigue iluminando estrella.

Muerta,

directo al pecho. 

Solo tú lo sabes. 

Solo yo lo sé. 

Es difícil de entender pero sin querer lo hacemos, lo sacamos, lo lanzamos. 

Quizá sin darnos cuenta, 

quizá demasiado conscientes. 

Sin preguntar, sin querer saber, sabemos porque hacemos cosas maquilladas de decisión propia. 

Sabemos porque seguimos viéndolo aún teniéndolo tan claro. 

Sabemos, que no entendemos el porqué. 

Es algo que ya grabamos dentro, no se puede evitar, lo sabíamos, no es posible. 

Aunque sea la piedra más negra, es nuestra piedra y eso no se puede cambiar. 

Aunque yo no lo quiera, aunque tú ahora no lo sepas o si. 

Pero dando la vuelta a la esquina parece que no existe o mejor aún que nunca existió. 

Es mejor vivir engañado tras un montón de viejas palabras, de nuevas, de flores, de comienzos, sin duda.

Palabra a palabra sabía como iban a ocurrir las cosas como el soplo de aire fresco lo iba a provocar yo pero no lo llegaría a disfrutar, no había manera. 

Sientos las piedras, siento los empujones a un vacío necesario para llenarlo de flores. 

Otro disparo, 

otra vida, 

yo sigo viva, visitándote de vez en cuando. 

Tumbada en tus pestañas sabiendo que ahí todo pasa.

Que no hay mayor poesía que verte bailando en mi vida, salvando mi vida. 

Piel de mi piel.

"Que dicen que la noche se ha quedado corta, que a ti te da lo mismo, que a mi ya no me importa."

Tengo guardadas tantas notas, letras torcidas y elevadas, sabiendo yo únicamente el motivo de porque están tan altas. 

Sabiendo solo yo el motivo de las firmas en la esquina derecha. 

Sabiendo yo solo el motivo de las letras escritas a máquina a las 4 de la mañana. 

Tengo guardadas decenas de frases, de sentimientos, de versos, de milagros plasmados en papel. 

Y aquí pequeño rincón, tengo tanto escrito, tengo tantas celebraciones, despedidas, enfados y desenfados, tengo tantos sobres, tantas notas...tanto papel que es oro para mi. 

"Hay una ventana sin luz,

hay manchas en el techo. 

Todo mi mundo está en llamas.

Pero me alegro de verte."

Silencio.

Guerra continua sin decirnos nada, sin querernos decir nada.

Gritandonos en silencio, sabiendo lo que dicen nuestros ojos en morse. 

Nuestras vidas ya cansadas. 

Nuestras promesas ya estancadas. 

Quién nos esta mirando desde arriba, sabiendo una vez más lo que no nos atrevemos a decir, lo que no dejamos de esconder. 

A la de antes, gracias por tanto.

A la cantidad de gente que he odiado sin yo querer, sin querer saber.

A la cantidad de gente que he dejado pasar, oportunidades, recuerdos momentos. 

La cantidad de lágrimas que tengo guardadas por si un día me faltan. 

La alegría que he ganado, las ganas la confianza. 

Lo que me arrepiento de dolores de corazón los domingos y de dolores de cabeza los lunes. 

Ahora tus manos firmes, nuestros cuerpos unidos, en la cima de la montaña. 

La de veces que he dudado de mí misma, de mi sombra, creyendo verdades a medias, mentiras enteras. 

La de veces que me he consumido, la de veces que me he reiniciado, la de veces que me he martirizado. 

De la de veces de las que me has salvado dejándome dormir en tu pecho, en casita.